10 diciembre 2009

La mejor maestra

Ahi os va una bonita historia para variar espero que se os salten las lagrimas como a mi.


La Mejor Maestra

1 comentario:

José María dijo...

Realmente es una bonita historia. A veces un pequeño detalle; dedicar un poquito de atención; escuchar a quien tiene un problema ... puede encender la luz que alumbre el camino a seguir en el futuro, puede ayudar a confiar y valorarse uno a sí mismo ...
Y especialmente si esto ocurre en la edad infantil. Quienes hemos trabajado muchos años con niños, lo entendemos perfectamente.
Un abrazo